Examina la taza del inodoro
La forma y consistencia de sus deposiciones, revelará si algo anda mal con su digestión.
La digestión no es algo de lo que hablemos, pero tal vez deberíamos hacerlo porque demasiadas personas sufren de problemas digestivos. Por ejemplo, barriga hinchada, gases malolientes o heces de diferente tipo. Los problemas con la digestión también son una de las razones más frecuentes por las que visitamos al médico.
Para identificar el problema, su médico generalmente le preguntará con qué frecuencia defeca, así como sobre la forma y consistencia de sus heces. Por lo tanto, es una buena idea mirar lo que queda en la taza del inodoro antes de tirar la cadena y también antes de acudir al médico.
Los médicos y dietistas, entre otras cosas, usan la llamada escala de heces de Bristol para evaluar si algo está mal con su digestión. Esta escala clasifica la consistencia y la forma de las heces humanas en siete categorías diferentes.
¿Cuál es el aspecto de sus heces?
- Categoría 1: Bultos pequeños y duros difíciles de expulsar. Puede ser una señal de que padece estreñimiento masivo. Falta fibra y líquido en su dieta.
- Categoría 2: Gruesas, con protuberancias duras, difíciles de expulsar y que a menudo causan riesgo de rasgaduras y hemorroides. Sufre de un fuerte estreñimiento y falta fibra y líquidos en la dieta.
- Categoría 3: Como salchichas con grietas y fisuras en la superficie. Es posible que necesite más líquidos.
- Categoría 4: Como salchichas o manguera, suave y con una superficie lisa. Por lo general, estas son las heces de las personas que se sientan en el inodoro una vez al día.
- Categoría 5: Bultos suaves y de expulsión fácil. Por lo general, en personas que defecan varias veces al día.
- Categoría 6: Como una sopa o papilla grumosa y viscosa. La forma y la consistencia se encuentran en el límite entre lo normal y la diarrea.
- Categoría 7: Líquidas y sin sustancia. Es posible que tenga una infección estomacal o una intoxicación alimentaria. Recuerde tomar mucho líquido como compensación.
El ritmo digestivo es individual
No hay dos personas iguales, y esto vale también para nuestro ritmo digestivo. Donde puede ser normal que una persona vacíe el intestino una o varias veces al día, puede ser normal que otra persona haga esto 3-4 veces a la semana. Por lo tanto, puede ser difícil decir qué es saludable y normal.
En su libro «Estómago sano: logre una buena digestión y un sistema inmunitario fuerte», la doctora Søs Wollesen compiló la siguiente lista de verificación para definir un patrón normal de heces sin estreñimiento:
- ¿Defeca tres veces a la semana o más?
- Normalmente, ¿puede defecar sin necesidad de esforzase?
- ¿Son sus heces en general relativamente blandas?
- ¿Hace más de 30 g de heces por visita al baño? ¿Corresponde esto a buena parte de la capacidad de la taza del inodoro?
Si pudo responder “sí” a todas estas preguntas, su digestión se encuentra funcionando bien.
Nuestro estilo de vida desequilibra nuestro sistema digestivo
Puede haber muchas razones para un desequilibrio en nuestro sistema digestivo. Por ejemplo, la enfermedad y el estrés pueden causarlo. Pero el trabajo sedentario y la falta de ejercicio también contribuyen a que nuestro sistema digestivo se desequilibre y a que muchos sufran de estreñimiento. Otra explicación importante de por qué, especialmente muchas mujeres jóvenes sufran de estreñimiento es que reprimen sus deseos de defecar porque les avergüenza que otras personas puedan escuchar u oler sus deposiciones.
De esta manera, si se reprime durante mucho tiempo el impulso, las heces se acumularán en el intestino. A largo plazo, esto debilita el peristaltismo, es decir, las contracciones en el intestino que empujan las heces hacia adelante, y el resultado será estreñimiento.
De esta manera se puede lograr un buen funcionamiento de la digestión
- Vaya al baño cada vez que sienta la necesidad
- Manténgase físicamente activo todos los días
- Beba al menos 1,5 litro de líquido al día y más si hace ejercicio
- Aliméntese en forma regular y evite las cantidades grandes de comida durante el día. Coma alimentos ricos en fibra
Por Christa Zenobie Dahl